(OSV News) -- Ricardo E. González Zayas fue uno de los más de 14,000 niños cubanos que formaron parte de la "Operación Pedro Pan" -- un éxodo secreto y masivo a los EE.UU. por vía aérea entre 1960-1962 desde la recién creada nación comunista situada a sólo 90 millas de la costa de Florida.
"Tengo que decir que, gracias a la Oficina de Bienestar Católico (en Miami), tuve tres comidas al día, un techo sobre mi cabeza y la mejor educación a la que uno podía aspirar", dijo González Zayas a OSV News.
González Zayas ha escrito sobre su historia de huida de la tiranía de Fidel Castro en 1962, la discriminación racial (en los Estados Unidos), y finalmente el asegurar para él y sus padres una nueva vida en sus memorias publicadas en 2020, "BLACK Pedro Pan."
Casado, con dos hijos y cuatro nietos, González Zayas dijo a OSV News que el libro de 180 páginas "es algo que siempre quise escribir, y que otros Pedro Panes a los que estaba cerca siempre me dijeron que debía escribir -- pero esperé hasta mi jubilación cuando tuve tiempo para hacerlo".
González Zayas dijo que el libro tardó un año en escribirse, y aseguró que "no fue nada difícil de lograr por dos razones".
"Una, me había mantenido en contacto con un grupo muy unido de Pedro Panes, entre ellos dos que eran compañeros negros con los que había asistido a un colegio jesuita", dijo. "La segunda razón era aún más simple, porque estaba escribiendo mi historia -- y escribiéndola como un cubano negro".
"La mayoría de la gente, cuando oye la palabra 'cubano', piensa inmediatamente en Ricky Ricardo de ‘I Love Lucy’ o en el actor de cine Andy García, pero no todos tenemos la piel tan clara", dijo González Zayas. Continuó: "Mi padre era de África, y tanto él como mi tía eran muy negros, mientras que el árbol genealógico de mi madre era mucho más complicado; de piel más clara que la de su marido, pero también uno que iba de más claro a más oscuro".
González Zayas, que nació en Cuba en 1949, dijo: "Tenía una vaga idea de por qué me iba (debido al cierre de escuelas por parte del gobierno), pero también corría el rumor de que los niños pasarían a estar bajo la tutela del Estado".
A su llegada a Florida, González Zayas vivió en un centro de acogida temporal para niños llamado Florida City, un enorme complejo cerrado de apartamentos.
"No tuve contacto con la cultura floridana durante todo un año, lo que explica por qué -- cuando subí a un autobús, me senté delante y me hicieron pasar a la parte trasera -- no entendí el motivo", dijo Zayas.
La razón -- la tez oscura de Zayas -- la explica Devyn Spence Benson, actualmente profesora de historia y estudios afroamericanos en la Universidad de Kentucky y autora de "Antiracism in Cuba: The Unfinished Revolution" (“El antirracismo en Cuba: La revolución inacabada”).
"Como me dijo en julio de 2012, 'el exilio cubano negro no es la misma experiencia que el exilio cubano blanco, y la diferencia es como el elefante en la habitación del que nadie quiere hablar'", explicó Benson en su prólogo al libro de González Zayas. Señaló que la historia de González Zayas también trata de cómo él y sus padres hicieron una nueva vida en "un país conocido por su racismo contra los negros, al que habían enviado a su único hijo".
La experiencia de racismo de González Zayas, sin embargo, no es una experiencia directa del racismo de los estadounidenses blancos en Florida durante la época del movimiento de los derechos civiles.
"Yo -- y mis padres que vinieron más tarde -- llegamos a Miami en la época de las sentadas en los mostradores de los restaurantes y demás", señaló el autor, refiriéndose a un tipo de acción de protesta por los derechos civiles de las personas afroamericanas. "Miami era muy, muy blanca y racializada, pero a medida que aumentó la migración desde Cuba, Puerto Rico y otros lugares, la mayoría de la población (blanca) se fue".
Sin embargo, González Zayas explicó que esto sólo introdujo en Miami un tipo diferente de racismo contra los negros que persiste en la actualidad.
"Hoy Miami es una ciudad de dominio cubano blanco, y aunque el racismo hispano/cubano es diferente -- y también muy complejo -- el resultado final sigue siendo el mismo: Miami no ha sido amistosa con los negros ni con los cubanos (negros) -- nunca", dijo González Zayas.
No es que este joven refugiado -- especialmente a medida que crecía -- dejara que este obstáculo le detuviera.
"Asistí a la escuela primaria católica San Juan Apóstol, a la preparatoria católica Belén -- la más prestigiosa de su tipo en Miami --, a la secundaria católica Monseñor (Edward) Pace y a St. Thomas University", recordó el autor. Se licenció en Humanidades en el Biscayne College de Miami y después trabajó 27 años en la compañía de seguros Travelers, en el gobierno municipal de Miami y, por último, en el gobierno del condado de Miami-Dade.
La ex alumna de Pedro Pan Juanita García compartió sus opiniones sobre el libro y su autor.
"Llegué a Miami en 1962 junto con mi hermano, y según tengo entendido, Ricardo llegó antes que nosotros", dijo García a OSV News. "Todos fuimos al complejo de Florida City, aunque a diferencia de Ricardo, mi hermano y yo nos quedamos allí un par de semanas".
García dijo que la falta de familiaridad del público con la Operación Pedro Pan, en su opinión, "se deriva del hecho de que a pesar de que Cuba estaba en la imagen, y Miami era nuestro destino, todo el asunto seguía siendo localizado".
"No había forma de que la gente se enterara, y por eso hoy en día la mayoría de la gente sigue sin saber al respecto", dijo García.
García dijo que había animado a González Zayas a escribir este libro, para que su experiencia como cubano negro -- a diferencia de cubano blanco -- pudiera conocerse mejor.
"Mis experiencias no fueron las mismas que las suyas, y es interesante observar las formas en que él ve ahora estas experiencias, muchos años después", dijo García.