Arzobispo de Cochabamba pide acabar con la violencia contra la mujer

Ciudad del Vaticano

"Buscar soluciones que acaben con la violencia contra la mujer y tener un profundo respeto por ella, que es la figura de María en nuestra sociedad, como hermana, madre, esposa". Son dos de los puntos centrales que destacó el Arzobispo de Cochabamba y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Boliviana, Monseñor Oscar Aparicio, al presidir la Eucaristía dominical el 22 de agosto, desde la Basílica Menor de San Francisco en la ciudad de La Paz.

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En su homilía el prelado subrayó que buscar el acercamiento y el diálogo verdadero a nivel social es algo fundamental, para frenar esta cultura de agresividad y de violencia, que lastimosamente "vemos traducida en nuestras relaciones interpersonales, en nuestras calles, en nuestras ciudades, en nuestros campos".

Por ello, Monseñor Aparicio invitó a todos a poner en práctica el respecto, la escucha y la aceptación del otro, "para encontrar soluciones pacíficas y concertadas, respetando profuntamente la vida, la familia y a la mujer".

"Hemos escuchado muchas veces, también de parte de las autoridades, sobre la necesidad de poder caminar en este respeto y buscar soluciones al feminicidio, o al infanticidio. A todos nos preocupa, pero eso tiene que traducirse de forma real y verdadera respetando, en esta sociedad, a la mujer", puntualizó el prelado, reiterando el llamado de los obispos al diálogo, la justicia y la reconciliación, puesto que “necesitamos vernos como hermanos”:

“Se trata por tanto de tomar la opción por Dios, optar por la vida, optar por el respeto, optar por la verdad, optar por el amor, aunque muchas veces esto puede significar también ir contracorriente. Por eso el anunciar la vida y el optar por Dios, hoy más que nunca, es un imperativo para todos nosotros y también para una nación como la nuestra”

Antes de concluir su homilía, el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Boliviana aprovechó para saludar a los catequistas, en su día y les dedicó unas palabras especiales:

“Recemos por nuestros catequistas. Apreciamos la labor que hacen desde siempre y que es fundamental: gracias a estos hermanos nuestros que se ponen en servicio de la Palabra de Dios, en la construcción del Reino de Dios y en la presentación de Jesucristo Nuestro Señor, el mayor tesoro que podemos tener”