VATICAN NEWS
En la intervención de Mons. Cabrejos en el Congreso de Pastoral Hispana, el prelado dijo que el proceso de renovación, dio inicio desde su mandato como presidente del Celam, y el objetivo es concretar un proceso que sigue las líneas del Vaticano II, “el proceso sinodal impulsado por el Papa Francisco y en el contexto del nacimiento de la Conferencia Eclesial de la Amazonía, para dar respuesta a los diversos escenarios eclesiales en la historia de nuestro Continente, abrir nuevos caminos a la dimensión social del Evangelio, para una conversión integral permanente y para una Iglesia Sinodal en salida”.
En respuesta al Vaticano II, dijo el prelado, se llamó a las Iglesias locales a insertarse en las culturas de los pueblos a semejanza de la Encarnación. Mons. Cabrejos, también ha recalcado del Concilio el llamado a la participación de todos y la atención a la vida laical, viendo al laico como quien debe participar “de una colaboración eclesial que deviene de su corresponsabilidad como persona bautizada”, superando “una visión meramente colaborativa con la jerarquía”.
En referencia al Magisterio Pontificio, Mons. Miguel Cabrejos ha ido relatando diferentes referencias de los papas del postconcilio al Celam. En ese sentido, el Papa Francisco ha pedido al Celam que sea “una casa al servicio de la comunión y de la misión de la Iglesia en América Latina; un centro propulsor de la conciencia discipular y misionera; una referencia vital para la comprensión y la profundización de la catolicidad latinoamericana”.
Mons Cabrejos también ha reflexionado sobre la sinodalidad, camino de la Iglesia del tercer milenio, como ha repetido constantemente el Papa Francisco, destacando que “caminar juntos es el camino constitutivo de la Iglesia”.
Abordando el Magisterio de la Iglesia de América Latina y el Caribe, retoma las reflexiones de Aparecida, donde se vislumbran “los indicios de una eclesiología en clave sinodal, que incluye a todos(as) en los procesos de discernimiento, toma de decisiones, planificación y ejecución”, algo que considera fundamental para comprender al Papa Francisco. En Aparecida se destaca un nuevo modo eclesial, en el que “los laicos deben participar del discernimiento, la toma de decisiones, la planificación y la ejecución”, algo asumido por el Celam, llamado a “discernir la realidad para ponernos al servicio del Pueblo de Dios”, según su presidente.
El prelado dijo además que se busca que el Celam sea “procesual, articulado y sinodal, con prioridades comunes en los centros de programas”, que sea un referente y posicione a la Iglesia en América Latina y el Caribe, que genere “nuevos procesos y estructuras que vinculen iglesias vecinas y afines”, que haga visible “la vitalidad evangélica de la Iglesia latinoamericana y caribeña” en este cambio de época eclesial y social.
Es ahí que se ubica el proceso de renovación y reestructuración, ha insistido Mons. Cabrejos, que destaca el aumento de las alianzas en todos los niveles. Un proceso en construcción, en el que cada Centro Pastoral tiene su ritmo y responsables, en el que se agradecen actitudes “de escucha, de colegialidad y comunión, de colaboración fraterna y sinodal”. Se trata de ser una Iglesia en salida misionera y sinodal, impregnada de la Alegría del Evangelio, concluía el presidente del Celam.