Tiziana Campisi-Ciudad del Vaticano
Unas 10.000 personas se vieron obligadas a evacuar temporalmente los pueblos de Beit Meir, Ksalon, Ramat Raziel, Shoresh, Sho'eva y Givat Ye'arim. La emergencia ha pasado, pero ahora se están contando los daños, y el reverendo Sauca dirigió su pensamiento a los que han sufrido pérdidas, asegurando la oración del Coe también por los que están trabajando por los más necesitados. Cada vez es más evidente que los incendios de este año en todo el mundo no son de la misma magnitud que en años anteriores", dijo el Secretario General en funciones del CdE.
Forman parte de los fenómenos extremos que se observan cada vez más como consecuencia del cambio climático. El cambio climático inducido por el hombre está acelerando el cambio radical de nuestro único hogar planetario". El reverendo Sauca también expresó su agradecimiento a los profesionales y voluntarios que participaron en la extinción de los incendios. "Estamos agradecidos de saber", añadió, "que varios camiones de bomberos, tanto de Israel como de la Autoridad Palestina, trabajaron codo con codo. En su carta, el secretario general en funciones del CdE subraya que finalmente en tiempos de crisis y dolor "se necesita algo más que cobijo, comida, alimento físico" y que precisamente "las Iglesias están para dar consuelo y consejo, hospitalidad y esperanza, fuerza y solidaridad", como están haciendo ahora las Iglesias de Palestina e Israel con los damnificados por los incendios.
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