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May 30, 2024Por Robert Fastiggi, Noticias OSV
(OSV News) -- Hacer una peregrinación a un santuario mariano es una hermosa manera de celebrar la fe católica. Desafortunadamente, no todas las personas tienen el tiempo o el dinero para peregrinar a uno de los grandes santuarios marianos del mundo como Nuestra Señora de Guadalupe en México, Nuestra Señora de Lourdes en Francia o Nuestra Señora de Fátima en Portugal. Existen, sin embargo, numerosos santuarios marianos de especial importancia repartidos por todo Estados Unidos. A continuación, seis santuarios que vale la pena considerar.
1. Nuestra Señora del Pronto Socorro, Nueva Orleans
El Santuario Nacional de Nuestra Señora del Pronto Socorro está ubicado en el campus de la Academia Ursulina de Nueva Orleans. Aunque el santuario actual fue consagrado en 1928, su origen se remonta a una promesa hecha en 1810 a Nuestra Señora por la hermana ursulina Madre San Miguel Gensoul.
Las Hermanas Ursulinas llegaron por primera vez a Louisiana en 1727 y establecieron la Academia Ursulina para educar a los hijos de los colonos europeos y de los criollos locales, esclavos o libres. En 1803, Estados Unidos compró Louisiana y el presidente Thomas Jefferson envió una carta a las Hermanas Ursulinas asegurándoles que podrían conservar su propiedad.
Sin embargo, las hermanas tenían poco personal y la superiora, la Madre St. André Madier, escribió a su prima, la Madre St. Michel Gensoul, en Francia, pidiéndole que viniera a Nueva Orleans para ayudar a la comunidad. La Madre St. Michel pidió este permiso al Obispo Nicolas-Marie Fournier de Montpellier, Francia, pero él dijo que sólo el Papa podía dar esta autorización. El Papa Pío VII, sin embargo, estaba cautivo en manos de Napoleón en ese momento, y no se sabía con certeza si se podría contactar con él para que diera su permiso. La Madre St. Michel rezó ante una estatua de Nuestra Señora pidiendo que su petición fuera recibida por el Papa. Si se le concedía, prometía honrar a la Santísima Virgen con el título de Nuestra Señora del Pronto Socorro.
Su petición fue concedida. Envió una carta a Pío VII desde Montpellier el 19 de marzo de 1809. El 28 de abril, una carta de un cardenal autorizado por el Papa le concedía permiso para ir a Louisiana. La Madre St. Michel hizo tallar una estatua de Nuestra Señora del Pronto Socorro y fue bendecida por el Obispo Fournier. Esta estatua, junto con la Madre St. Michel, llegó a Louisiana en 1810.
Muchos milagros y gracias se han asociado con la estatua de Nuestra Señora del Pronto Socorro en Nueva Orleans. Cuando un incendio arrasó la ciudad en 1812, las Hermanas Ursulinas oraron ante la estatua y el fuego cambió de dirección. Durante la Guerra de 1812, las fuerzas británicas parecían seguras de derrotar a las tropas estadounidenses superadas en número en Nueva Orleans. La noche del 7 de enero de 1815, las Hermanas Ursulinas oraron ante la estatua. Durante la Misa de la mañana siguiente, llegó un correo para anunciar que las tropas estadounidenses al mando de Andrew Jackson habían derrotado milagrosamente a los británicos. Una niebla se había extendido hacia el área donde se habían alojado los británicos y, por error, se dirigieron a un pantano donde las tropas estadounidenses, superadas en número, podían dispararles fácilmente. El general Jackson, al enterarse de las oraciones de las hermanas, fue al convento para agradecerles.
La fiesta de Nuestra Señora del Pronto Socorro se celebra en Nueva Orleans el 8 de enero en conmemoración de su milagrosa intervención. Hoy, la estatua se encuentra en el hermoso Santuario Votivo Nacional de Nuestra Señora del Pronto Socorro (National Votive Shrine of Our Lady of Prompt Succor).
2. La Basílica del Santuario Nacional de Nuestra Señora de Fátima, Lewiston, Nueva York
En los alrededores de Buffalo, Nueva York, hay dos santuarios marianos de especial importancia. En primer lugar, cabe mencionar el Santuario Nacional y la Basílica de Nuestra Señora de la Victoria en Lackawanna. Se trata de una magnífica basílica de estilo europeo que debe su existencia a la dedicación del Padre Nelson Baker (1842-1936), a quien Benedicto XVI le concedió el título de venerable en 2011. Terminada en 1926 y elevada a la categoría de basílica ese mismo año, esta hermosa iglesia de estilo barroco tiene un interior lleno de pinturas, mosaicos y trabajos en mármol. Esta basílica es un testimonio apropiado de la devoción del Venerable Nelson Baker a Nuestra Señora y a los pobres huérfanos a quienes ayudó.
A unas 42 millas de distancia se encuentra la Basílica del Santuario Nacional de Nuestra Señora de Fátima en Lewiston, justo al norte de las Cataratas del Niágara. El santuario está ubicado en 16 acres de antiguas tierras de cultivo donadas por el Señor Walter Ciurczak y su esposa en 1954, y es servido por sacerdotes de los Clérigos Regulares de San Pablo, los barnabitas. Cuando Walter Ciurczak sufrió un derrame cerebral grave y su esposa también enfermó, oraron a la Santísima Madre y prometieron donar una parte de su tierra a una comunidad religiosa que la usaría en su honor. Después de recuperarse, fueron visitados por el Padre Igino Andreani de los barnabitas, y le contaron su historia. Cuando el Padre Andreani conoció a un hombre que quería donar una estatua de Nuestra Señora de Fátima, surgió la idea de construir un santuario en su honor.
La iglesia se comenzó a construir en 1961 y se dedicó en 1965. En 1975, el Beato Pablo VI elevó la iglesia al estado de basílica. La cúpula de la basílica tiene 100 pies de diámetro y 55 pies de alto. En lo alto de la cúpula hay una estatua de Nuestra Señora de Fátima que mide 13 pies de alto y pesa 10 toneladas. El altar mayor de la basílica está realizado en mármol italiano de Carrara. Frente a la basílica hay un rosario gigante de 59 luces y un estanque del rosario con forma de corazón en honor al Inmaculado Corazón de María.
Los terrenos del Santuario Nacional de Nuestra Señora de Fátima son magníficos. Además del campanario de 48 pies de altura, hay una Colina de Fátima con un rosario de cuentas hechas de auténticas balas de cañón. Éstas simbolizan la necesidad de entregar las armas de guerra a la Reina de la Paz. En el recinto, los visitantes encontrarán numerosos santuarios, como los dedicados a Santa Ana, Nuestra Señora de Czestochowa, San Antonio María Zaccaria y San Padre Pío. También está la capilla original de Nuestra Señora de Fátima, que sirvió a los peregrinos hasta que se terminó la iglesia basílica en 1965.
3. La Gruta/Santuario Nacional de Nuestra Madre Dolorosa, Portland, Oregón
Este santuario surgió gracias a una oración y una promesa hecha por un joven de Kitchener, Ontario, a finales del siglo XIX. Ambrose Mayer sabía que su madre estaba al borde de la muerte después de dar a luz a su hermana menor. Oró fervientemente por la vida de su madre en la iglesia parroquial cercana y prometió que haría algo grandioso por la iglesia si su madre y su hermana sobrevivían. Sus oraciones fueron escuchadas. Tanto su madre como su hermana sobrevivieron y él nunca olvidó su promesa.
Más tarde, Ambrosio se unió a la orden religiosa servita, dedicada a los Dolores de María. Finalmente fue enviado a Portland, Oregon, donde se convirtió en el primer pastor servita en esa ciudad. En 1923, el padre Mayer encontró una propiedad en venta en una colina escarpada. Vio esto como un sitio para un posible santuario, pero el precio de venta fue de 48.000 dólares.
Después de depositar todo lo que tenía (3.000 dólares) como depósito inicial, comenzó una campaña nacional para recaudar fondos para la compra del terreno en el que esperaba construir un Santuario de Nuestra Madre Dolorosa. Escribió y recibió una carta personal del Papa Pío XI otorgando una bendición apostólica especial a todos aquellos que contribuirían a la construcción del santuario previsto.
Las obras del santuario comenzaron en 1923. Se excavó una cueva en la ladera de un acantilado de basalto de más de 100 pies de altura. Esta se convirtió en la famosa gruta del santuario, a la que finalmente se añadió un altar de piedra y una réplica de la Piedad de Miguel Ángel. La primera Misa y dedicación del Santuario de Nuestra Madre Dolorosa tuvo lugar el 29 de mayo de 1924, con 3.000 personas presentes junto con el Arzobispo Alexander Christie. El arzobispo rezó para que el santuario sea un lugar "donde el espíritu humano pueda buscar paz y consuelo". En el terreno se construyó una iglesia más grande, la Capilla de María, Madre de la Raza Humana, que se inauguró en 1955. En 1983, el santuario fue reconocido como Santuario Nacional, y desde entonces millones de personas han visitado este hermoso santuario en la cima de una colina, que también cuenta con estaciones al aire libre de los Dolores de María.
El Santuario de Nuestra Madre Dolorosa (the National Sanctuary of Our Sorrowful Mother) fue el lugar del primer Congreso Mariano celebrado en los Estados Unidos. El congreso tuvo lugar en agosto de 1934 y se estima que asistieron entre 2.000 y 3.000 personas a cada sesión. En la ceremonia de clausura del 15 de agosto de 1934, una multitud de al menos 20.000 personas se reunió para recibir la bendición del cardenal Alexis-Henri-Marie Lépecier, quien consagró a todos los presentes a la Santísima Virgen María.
4. Santuario Nacional de Nuestra Señora de La Leche, St. Augustine, Florida
El asentamiento católico más antiguo en lo que hoy son los Estados Unidos se encuentra en San Agustín, Florida, que fue fundado en 1565. San Agustín es también la ubicación del Santuario de Nuestra Señora de La Leche y Buen Parto, que es el primer santuario a Nuestra Señora en los Estados Unidos. Fue construido inicialmente por los españoles alrededor de 1620 y está ubicado en los terrenos de la Misión Nombre de Dios en St. Augustine.
La capilla original de 1620 probablemente fue hecha de madera y destruida por un incendio o un huracán. Hay evidencia arqueológica de un santuario hecho de piedra de coquina y cimientos de concha de ostra de alrededor de 1678. Desde finales del siglo XVII hasta finales del siglo XIX, se construyeron, destruyeron y luego reconstruyeron varios otros santuarios. El 14 de noviembre de 1875, el Obispo Augustin Verot, primer obispo de la Diócesis de St. Augustine, dedicó un santuario reconstruido a Nuestra Señora de La Leche. Este santuario, sin embargo, fue destruido por un huracán y finalmente reconstruido. La capilla actual data de 1915 y tiene capacidad para unas 30 personas a la vez. Está construido según el estilo misionero español del siglo XVI y contiene una reconstrucción de la estatua original de Nuestra Señora de La Leche, que muestra a la Santísima Madre amamantando al Niño Jesús.
Algunos creen que la devoción a Nuestra Señora de La Leche se remonta a la Iglesia Gruta de la Leche en Belén. Esta gruta podría remontarse al siglo IV y se cree que es el lugar donde la Santísima Madre amamantó al niño Jesús. Hasta el día de hoy, los franciscanos mantienen esta iglesia santuario, y muchas mujeres que buscaban tener un hijo lograron concebir uno después de orar allí.
La inspiración más próxima del Santuario de Nuestra Señora de La Leche en St. Augustine fue un milagro reportado durante el reinado de 1598-1621 del rey Felipe III de España. Se esperaba que tanto la madre como el niño murieran cuando ella diera a luz, pero ambos se salvaron de la muerte después de que la madre oró ante una estatua de Nuestra Señora de La Leche. Felipe III se enteró de este milagro e hizo colocar la estatua en la catedral.
Por lo tanto, la devoción a Nuestra Señora de La Leche era muy fuerte cuando los españoles se establecieron en Florida. Al igual que en la Gruta de la Leche en Belén, muchas mujeres que buscan concebir rezan y encienden velas en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de La Leche en Florida. Ha habido muchos informes de niños concebidos después de que se dijeron estas oraciones, así como informes de partos seguros de embarazos problemáticos. El santuario y los hermosos terrenos de la misión son frecuentados no sólo por mujeres que buscan concebir o tener un parto seguro. Muchos otros fieles también visitan el santuario para honrar a Nuestra Señora de La Leche.
5. El Santuario Nacional de Nuestra Señora de Champion, Champion, Wisconsin
Wisconsin es un estado bendecido con algunos santuarios marianos destacados. En Madison se encuentra el Santuario del Movimiento de Schoenstatt, dedicado en 1953 a María como Madre Tres Veces Admirable. También hay tres santuarios marianos designados por los obispos de Wisconsin como lugares de peregrinación para obtener la indulgencia plenaria del Año de la Misericordia. Se trata de: la Basílica del Santuario Nacional de María Auxiliadora en Holy Hill; el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en La Crosse; y el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Champion, anteriormente dedicado como Santuario de Nuestra Señora del Buen Socorro.
Nuestra Señora de Champion es de especial importancia porque es el único santuario mariano en los Estados Unidos ubicado en el lugar de una aparición aprobada de la Santísima Virgen María. Las apariciones comenzaron el 9 de octubre de 1859, un año después de las apariciones en Lourdes, y la destinataria fue Adele Brise (1831–1896), una joven belga que había emigrado a Wisconsin en 1855. La Santísima Madre fue vista por Adele varias veces antes de revelar quién era y qué quería. Se identificó como "la Reina del Cielo que ora por la conversión de los pecadores". Pidió a Adele que se confesara y ofreciera su sagrada Comunión por la conversión de los pecadores. También pidió a Adele que enseñe a los niños "lo que deben saber para su salvación". Esto incluía "la Señal de la Cruz, el catecismo y cómo acercarse a los sacramentos".
Adela obedeció este pedido de la Santa Madre. Al principio, comenzó a enseñar a los niños ella sola, pero finalmente fundó una comunidad de tercera orden llamada Hermanas de San Francisco de Asís (también conocidas como Hermanas de la Buena Salud). Se construyó un santuario en honor a Nuestra Señora, llamado Santuario del Buen Socorro debido a la devoción de Adele a Notre Dame de Bon Secours de su Bélgica natal. Muchas gracias han brotado de este santuario, que fue preservado (de manera aparentemente milagrosa) de las llamas del furioso incendio de Peshtigo de 1871. En 2010, el Obispo David Ricken de Green Bay, Wisconsin, declaró que las apariciones y locuciones dadas a Adele Brise en 1859 son dignos de ser considerados sobrenaturales por los fieles cristianos.
6. Santuario Nacional Basílica de Nuestra Señora de San Juan del Valle, San Juan, Texas
Los orígenes de esta basílica santuario se remontan al pueblo de San Juan de Los Lagos, cerca de Guadalajara, en el estado mexicano de Jalisco. En este pueblo se construyó una iglesia misionera con una pequeña imagen de la Inmaculada Concepción en su interior. En 1623, una familia viajera de acróbatas visitó San Juan para ofrecer una actuación. La hija menor de la familia perdió el equilibrio, cayó y murió. Una mujer indígena que ayudaba a cuidar la iglesia local colocó la imagen de la Virgen Inmaculada sobre el cuerpo de la pequeña. La niña milagrosamente volvió a la vida. Pronto, la devoción a la Virgen de San Juan se extendió por todo Jalisco, así como por otras partes de lo que hoy es México y Estados Unidos.
En 1949, el Padre José María Azpiazu, Oblato de María Inmaculada, era párroco de la parroquia de San Juan Bautista en San Juan, Texas, que se encuentra cerca de McAllen, Texas, en el Valle del Río Grande, justo al norte de la Frontera mexicana. El Padre Azpiazu quiso difundir la devoción a Nuestra Señora de San Juan y recibió permiso de su obispo para hacer una reproducción de la estatua mariana venerada en San Juan de Los Ángeles en México. Al principio, esta estatua se colocó en la Iglesia de San Juan Bautista, pero pronto comenzó la construcción de una iglesia y un santuario más grande que se dedicaron en 1954.
La devoción al santuario y a la estatua creció gradualmente. Sin embargo, el 23 de octubre de 1970 ocurrió una tragedia. Se ofreció una Misa especial concelebrando 50 sacerdotes. Una avioneta se estrelló contra el techo del santuario y estalló en llamas. Uno de los sacerdotes, junto con un sacristán, se apresuraron a rescatar la estatua del fuego que se extendía. Pero por un aparente milagro, los sacerdotes y fieles se reunieron para Misa en el santuario y los niños de la escuela en una cafetería adyacente no sufrieron heridas. El piloto murió.
Aunque hubo daños por alrededor de 1,5 millones de dólares, pronto comenzaron los esfuerzos para reconstruir el santuario. El Obispo John J. Fitzpatrick de la Diócesis de Brownsville, Texas, decidió construir un nuevo santuario justo al norte del santuario anterior y reconstruir la iglesia parroquial en el sitio del santuario destruido.
La construcción del nuevo santuario comenzó en 1976 y fue dedicado el 19 de abril de 1980. Asistieron unas 50.000 personas a la dedicación, en la que estuvieron presentes el cardenal Humberto Medeiros y el Obispo Fitzpatrick. Nuestra Señora de San Juan del Valle fue reconocida como santuario nacional por los obispos de Estados Unidos en 1988 y elevada a la categoría de basílica menor por el Papa San Juan Pablo II en 1999. Es uno de los santuarios marianos más visitados de Estados Unidos con un estimado de 1 millón de visitantes al año. El santuario se encuentra en 63 acres y la basílica tiene capacidad para más de 3.000 personas.
