‘No podemos ser neutrales’, dicen prelados venezolanos, pidiendo la publicación completa de los resultados electorales
By David Agren, OSV News
(OSV News) -- El Papa Francisco ha llamado a ambas partes para que "busquen la verdad" en las disputadas elecciones de Venezuela mientras la oposición denuncia fraude electoral (publicando actas de recuento como prueba) el régimen chavista gobernante se niega a publicar la información completa sobre la votación y reprime las manifestaciones.
Durante su discurso del Ángelus del 4 de agosto, el Papa Francisco dijo: "Dirijo un sentido llamamiento a todas las partes para que busquen la verdad, practiquen la moderación, eviten toda clase de violencia, resuelvan las disputas con el diálogo y se preocupen por el verdadero bien del pueblo y no por los intereses partidistas". También encomendó al país a la intercesión de Nuestra Señora de Coromoto.
Mientras tanto, dos clérigos de Venezuela advirtieron que el acoso a los sacerdotes por parte de políticos progubernamentales hace que el país siga los pasos de Nicaragua, donde la democracia ha desaparecido y la iglesia es perseguida.
El cardenal Baltazar Porras, arzobispo retirado de Caracas, y el cardenal Diego Padrón, arzobispo retirado de Cumaná, también escribieron en una declaración de tres páginas que el gobierno no ha logrado tender puentes con la oposición y sigue atrapado en la idea de "un ‘golpe de estado’ construido ad hoc", en lugar de publicar los resultados completos de las elecciones del 28 de julio, una medida exigida por la oposición y países que reconocen la victoria de la oposición, incluido Estados Unidos.
"La reacción del gobierno venezolano ha sido, hasta ahora, negar rotundamente el triunfo opositor y, sin mostrar pruebas, que son las actas de votación", dijeron los cardenales Porras y Padrón en el comunicado del 1 de agosto.
"El gobierno, en lugar de tender puentes con la coalición opositora... ha ensanchado el abismo frente a ella, considerando enemigos a todos los que no aprueban su conducta. Y ha decidido aniquilarlos (a los opositores) con la represión, la cárcel, la violencia y la muerte", dice el comunicado.
El documento del 1 de agosto no fue distribuido por la conferencia episcopal venezolana ni por la Arquidiócesis de Caracas, pero fue autenticado por los medios venezolanos varios días después.
"Lo que no podemos (hacer) es pasar a ser una iglesia más del silencio, dejando que el tiempo transcurra en balde. Tenemos que discernir en el Espíritu el momento presente como un kairós y actuar en consecuencia con valentía, al estilo de los apóstoles", dice el comunicado.
"No somos ni podemos ser neutrales", continuaron los cardenales. "Corresponde comprobar cuidadosamente los hechos, para denunciar proféticamente, aun a riesgo, las injusticias, y proclamar nuestros principios y valores, acompañando solidaria y pastoralmente al pueblo, tarea nada fácil pero necesaria".
Posteriormente, la oposición publicó actas de escrutinio del 79% de los centros de votación que mostraban que González recibió más del doble de los votos emitidos para Maduro. Los medios de comunicación internacionales, incluida The Associated Press, revisaron las actas y confirmaron las conclusiones de la oposición.
Los partidarios de la oposición han protestado en las calles, lo que provocó respuestas hiperbólicas de Maduro, como la construcción de mega prisiones con centros de reeducación para los manifestantes. Más tarde se jactó del encarcelamiento de 2.000 manifestantes y prometió un "máximo castigo".
En una publicación del 5 de agosto en X, González agradeció al Papa Francisco "por sus oraciones por la paz y la verdad de nuestra Venezuela".
Los llamados al diálogo han sido recibidos con consternación por la oposición, que ha negociado sin éxito con Maduro durante años para celebrar elecciones libres y justas y lo acusa de ganar tiempo, según analistas.
"La gente está enojada por la formulación de la necesidad de diálogo cuando claramente hay un fuerte agresor en el gobierno de Maduro y una oposición subyugada", dijo a OSV News Will Freeman, miembro de estudios latinoamericanos del Consejo de Relaciones Exteriores.
La situación en Venezuela ha resultado un tema espinoso para el Papa Francisco, quien fue elegido sólo ocho días después de que el ex presidente venezolano Hugo Chávez -- quien asumió el poder en 1999 y se enfrentó con los obispos del país -- muriera en marzo de 2013.
Los intentos del Vaticano de negociar acuerdos entre el gobierno venezolano y la oposición resultaron complicados al comienzo de su pontificado, y Maduro no cumplió su parte de los acuerdos, según analistas.
"La Iglesia Católica en Venezuela ha sido objeto de una profunda persecución", dijo a OSV News Geoff Ramsey, miembro principal para Venezuela en el Atlantic Council. "(Maduro) ve a la Iglesia como una de las pocas instituciones en Venezuela que permanece fuera de su control".
La oposición en Venezuela ha sido no ha sido efectiva y fue marcada por luchas internas en los últimos años. Pero se unió en torno a María Corina Machado -- quien fue descalificada para postularse -- cuando los votantes abandonaron a los chavistas gobernantes. Esto incluyó a los votantes de bajos recursos, en medio de una pobreza creciente, un colapso económico y 8 millones de compatriotas huyendo del país.
"La emigración ha destrozado familias y el que tal vez sea el mayor colapso económico en tiempos de paz en la historia del mundo hará que la gente se oponga a cualquier régimen gobernante", dijo Daniel Di Martino, oriundo de Venezuela y miembro del Instituto Manhattan. "La novedad es que la oposición tiene una operación bien organizada".
Las conferencias episcopales de América Latina se unieron al Papa orando por la paz en Venezuela el 4 de agosto.
"Nos conmueve la angustia y zozobra que viven tantas hermanas y hermanos nuestros que anhelan un futuro mejor para ellos, sus familias y comunidades", dijo el consejo de obispos latinoamericanos, comúnmente llamado CELAM, en un comunicado del 2 de agosto. "Animamos a seguir pidiendo a Dios, Señor de la historia, que ilumine el camino de Venezuela hacia la paz, justicia y el bien común".
El arzobispo Carlos Castillo de Lima celebró una Misa especial el 4 de agosto para los venezolanos que viven en Perú. "Deseamos que la justicia, la paz y la democracia estén aseguradas para el bien de todos. No puede seguir el grave atentado contra la libertad y la dignidad humana", afirmó.
"Sepan hermanos y hermanas venezolanas, que están en su país y los que han elegido Panamá como su hogar, ustedes no están solos, oramos para que la verdad, la transparencia sean las que prevalezcan en estos tiempos de oscuridad e incertidumbre", dijo el arzobispo José Ulloa de Panamá en una Misa celebrada el 4 de agosto. "Que la violencia sea suplantada por la paz y que la voluntad del pueblo depositada en las urnas sea reconocida y asumida por todo".
Por su parte, la Conferencia Episcopal Venezolana emitió otro comunicado el 7 de agosto con relación a las elecciones en la que decían que "desconocer la voluntad popular es ilegal y éticamente inaceptable", condenaban las restricciones a la libertad de expresión y las detenciones de muchos venezolanos sin el debido proceso, e invitaban a las autoridades "a valorar y defender la vida y la dignidad de la persona humana".
"Rechazamos, por ser contrarias a los derechos humanos, el uso de la violencia en las manifestaciones públicas, la presencia y actuación junto a cuerpos policiales de civiles armados como mecanismo para disuadir la realización de la protesta pacífica ciudadana", dijeron los obispos en el comunicado que fue publicado en Facebook.
"Como lo afirma la Declaración Dignitas Infinita, la Iglesia exhorta ardientemente a que la defensa de la dignidad humana esté en el centro del compromiso por el bien común y de todo ordenamiento jurídico", dijo el comunicado.
Los obispos también se solidarizaron con las familias que perdieron a sus seres queridos o que no conocen la ubicación de familiares que fueron detenidos por defender sus convicciones.
"Los venezolanos queremos vivir en paz y en democracia", concluyeron los obispos. "Los organismos ciudadanos actuando de modo imparcial, conforme a lo establecido en nuestro ordenamiento legal, deben hacer relucir la verdad y la justicia sobre las que se fundamenta la convivencia social… Elevemos nuestra oración por la salud y bienestar de todos los venezolanos".