Por Carol Zimmermann
Catholic News Service
WASHINGTON (CNS) -- Se espera que durante la segunda semana de julio, el presidente Donald Trump presente de nuevo documentación para poner fin al programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia, o DACA por sus siglas en inglés, después del dictamen de la Corte Suprema que decía que la administración había seguido un procedimiento erróneo dirigido a terminar el programa.
The Hill, una agencia de noticias políticas, informó el 6 de julio que la futura acción del presidente se había esperado durante la semana anterior y que al presente, "el momento exacto sigue siendo incierto".
El día después de la decisión sobre DACA de la corte, el 18 de julio, el presidente prometió hacer algo al respecto y en un tuit dijo que presentaría "documentos mejorados y aumentados" para responder a los requisitos para finalizar DACA. "Ni se ganó ni se perdió nada", dijo sobre la decisión, comentando que la corte había dado otro tipo de instrucción y la administración simplemente lo intentaría de nuevo.
El asunto ante la corte era la orden ejecutiva de Trump del 2017 de finalizar el programa de la era de Obama que había permitido a 700,000 jóvenes, traídos a Estados Unidos por sus padres en la niñez sin documentos legales, trabajar, asistir a la universidad y conseguir seguros de salud, sin enfrentarse a la deportación.
El presidente Barack Obama estableció DACA por orden ejecutiva en 2012.
La decisión de la corte en tres dictámenes distintos de cortes de apelación que bloqueó la orden de Trump de detener DACA básicamente dejó que el programa permaneciera en su lugar--protegiendo a los beneficiarios de la deportación y permitiéndoles recibir aún beneficios como autorización de trabajo--mientras enfatizaban que el presidente había tratado de rescindir el programa de manera errónea.
Los líderes católicos que trabajan en temas de inmigración inmediatamente predijeron que Trump continuaría sus esfuerzos de acabar con DACA, comenzando por presentar de nuevo documentación y hacerlo de modo que respondiera a los requisitos de la corte más alta.
El proceso "muy probablemente quedará enredado en litigio", dijo Ashley Feasley, directora de política migratoria y asuntos públicos en la Conferencia de Estados Unidos de Obispos Católicos.
Ilisa Mira, abogada en la oficina de Oakland, California, de Catholic Legal Immigration Network, o CLINIC, dijo igualmente que Trump podría producir un nuevo documento que satisficiera lo que busca la corte, pero que esto "traería más litigio".
Otro camino posible, dijo, sería que el Departamento de Seguridad Nacional lanzara una normativa que afectara al programa que necesitara un período de aviso y comentario y que llevaría muchos meses en finalizarse.
La opinión de la mayoría de la Corte Suprema, escrita por el Juez Principal John Roberts, decía que el gobierno no había dado razones aceptables para finalizar DACA y que la Secretaria de Seguridad Nacional, Elaine Duke, en sus esfuerzos por desmantelar el programa hace tres años, no utilizó todas las opciones para limitar el programa y no consideró la importancia del programa para sus participantes.
"Aquí la agencia falló en la consideración de temas evidentes sobre si mantener paciencia y qué hacer, si había que hacer algo, sobre los problemas para los recipientes de DACA", dijo la opinión. "Ese doble fallo levanta la duda sobre si la agencia apreció el alcance de su jurisdicción o ejercitó tal discreción de manera razonable. El camino apropiado, por tanto, es detener al DHS para que pueda reconsiderar el problema".
Mientras esperan a ver lo que hará el presidente, los defensores de inmigración, como Feasley y Mira, están urgiendo a los que apoyan a DACA a que pongan presión en el Senado para una legislación que pudiera conceder a los beneficiarios de DACA, conocidos como Dreamers (Soñadores), y a quienes tienen Estatus de Protección Temporal, o TPS, un camino hacia la ciudadanía.
"No podemos dejar al Senado que se abstenga", dijo Feasley en un seminario por internet del 19 de junio patrocinado por la Campaña Justicia para los Inmigrantes de USCCB.
Cuando se le preguntó si el tema podría esperar hasta después de las elecciones de noviembre, Feasley fue firme en afirmar que no se podría, "especialmente si el presidente se enroca; éste es realmente el momento", dijo.
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The following is an English version of the above translation.
Trump expected to refile paperwork soon in his effort to end DACA
By Carol Zimmermann
Catholic News Service
WASHINGTON (CNS) -- President Donald Trump is expected to refile paperwork during the second week of July to end to the Deferred Action for Childhood Arrivals program, or DACA, following the Supreme Court ruling that his administration went about trying to end the program the wrong way.
The Hill, a political news outlet, reported July 6 the president's upcoming action had been expected the previous week and currently "the exact timing remains in flux."
The day after the court's June 18 DACA ruling, the president vowed to do something about it and tweeted he would submit "enhanced papers" to comply with requirements to end DACA. "Nothing was lost or won," he said about the decision, saying the court had punted on it and the administration would just try again.
The issue before the court was Trump's 2017 executive order to end the Obama-era program that had enabled 700,000 qualifying young people, brought to the U.S. as children by their parents without legal documentation, to work, go to college and get health insurance -- and not face deportation.
President Barack Obama established DACA by executive order in 2012.
The court's combined decision on three separate appellate court rulings that blocked Trump's order stop DACA basically left the program in place -- protecting recipients from deportation and enabling them to still receive benefits such as work authorization -- while emphasizing the president went about rescinding the program in the wrong way.
Catholic leaders who work on immigration issues right away predicted Trump would continue his efforts to end DACA, starting with refiling the paperwork to do so in a way that complied with the high court's requirements.
The process will "likely immediately be mired in litigation," said Ashley Feasley, director of policy for Migration and Refugee Services for the U.S. Conference of Catholic Bishops.
Ilisa Mira, an attorney in the Oakland, California, office of Catholic Legal Immigration Network, or CLINIC, similarly said Trump could issue a new memo that she said would satisfy what the court was looking for but would "bring up more litigation."
Another possible path, she said, would be for the Department of Homeland Security to issue a regulation affecting the program that would need a notice and comment period and could take months to complete.
The Supreme Court's majority opinion, written by Chief Justice John Roberts, said the government failed to give acceptable reasons for ending DACA and that Homeland Security Secretary Elaine Duke, in her efforts to dismantle the program three years ago, didn't use all options to limit the program and didn't consider the program's importance to its participants.
"Here the agency failed to consider the conspicuous issues of whether to retain forbearance and what if anything to do about the hardship to DACA recipients," the opinion said. "That dual failure raises doubts about whether the agency appreciated the scope of its discretion or exercised that discretion in a reasonable manner. The appropriate recourse is therefore to remand to DHS so that it may consider the problem anew."
While waiting to see what the president does, immigration advocates, like Feasley and Mira, are urging DACA supporters to push the Senate for legislation that would give DACA recipients, known as Dreamers, and those with Temporary Protected Status, or TPS, a path toward citizenship.
"We can't let the Senate get a pass," Feasley said in a June 19 webinar sponsored by the USCCB's Justice for Immigrants campaign.
When asked if the issue could wait until after the November elections, Feasley was adamant it could not, "especially if the president is doubling down; it really is time," she said.